jueves, 5 de julio de 2018

EL CANDILEJO. (COLA DE LANZA)

Se refiere a la manera y forma espiritual como se deben aprovechar los bienes de la naturaleza, de manera especial, los animales (especie mayor y menor). Se concibe que todo en la naturaleza tiene dueños y que nosotros somos simples administradores, de los animales, al igual que del territorio y que, para el aprovechamiento de los bienes se debe pedir permiso, entonces hay que realizar un "pago" a través de rituales; de lo contrario afecta e incide en la mala producción, de manera especial en los animales.


Al frente de la vereda del Sestiadero, está ubicada la vereda el Zarzal, al lado de la casa donde vive José Oino, todas as noches al oscurecerse, se forma una llamarada y de este fuego van saliendo como unas personas con unos mechones de fuego, empiezan a andar en círculo y después salen por el camino, que conduce al río, van en fila en forma de procesión, van muy rápido. Llegan a un sitio determinado, estos nuevamente se reúnen y danzan en círculo y así prosiguen su marcha.


Mi madre nos prohibía mirar esto, ella decía que son como espíritus se nos pueden presentar visiones (alucinaciones ópticas) y pueden llegar a donde vivimos y hacer daño a los animales.


Estos espíritus son los candilejos, y nos cuentan que al observar estos espíritus si aumentan en la marcha es que vamos a tener suerte en la producción.


Estos espíritus son los candilejos, dicen que ellos son los dueños de los animales que tenemos en la finca, cuando aparecen así es porque andan visitando y mirando como están los animales.


Si las personas que tienen animales no los refrescan o brindan la sangre y las vísceras de los animales que se sacrifican pueden matar a los animales que uno tiene, por lo general siempre mueren como ataque cardíaco y desangrado. Si las personas que tienen estos animales no refrescan la finca, pueden acabar matando todos los animales y por último matan a los dueños.


Dicen que estos espíritus son como toro que respira fuego y la cola es en
forma de lanza.






Tomado del libro: "Por los senderos de la memoria y el sentimiento Paez"

No hay comentarios.:

Publicar un comentario